Rafael Rivapalacio Pontones, secretario general del Sindicato de Trabajadores del Infonavit, afirmó que la corporación no actúa de forma intimidatoria contra quienes tienen adeudos y remarcó que la representación laboral, se ha manifestado contra las prácticas indiferentes en que incurren ciertos despachos de cobranza.
Al encabezar el cambio de dirigencia seccional, el titular del Comité Ejecutivo Nacional afirmó que el Instituto no es el que amenaza o bien amedrenta a los trabajadores, y aseguró que estas acciones son responsabilidad de ciertos despachos de abogados, los que recurren a esta práctica para amedrentar a los trabajadores.
Acompañado del encargado en Baja California Sur, Daniel Adán Cota Fiol, refirió que el Instituto tiene aún un programa de regularización, el que deja llegar a los mejores arreglos para las dos partes, el que ha dado esenciales resultados al cumplir con la meta para el que fue creado.
“En este sentido incluso hemos tenido algunas reuniones, las cuales están centradas en dar un mejor servicio a los derechohabientes, con el afán de recuperar el sentido social que tiene el Infonavit”, señaló.
Afirmó que las residencias se dan con base en el poder de pago que tiene cada trabajador y aunado a esto, hay un esquema de subsidios que deja que los empleados registrados puedan conseguir una casa.
Además afirmó que el Infonavit no es una dependencia federal, en tanto que este no recibe dinero del gobierno ni de los empresarios, “es un organismo que funciona con recursos propios y los cobros que hace son destinados a seguir financiando otras viviendas”.
Cabe nombrar que Carlos Alfonso Solís Ruiz fue escogido como nuevo encargado y con esto tendrá que substituir a Néstor Guluarte Arce, quien concluyó con el periodo de cuatro años que establecen los estatutos.
Rivapalacio Pontones resaltó la trasparencia con que se realizó el proceso de elección y aseguró que este se desarrolló en un marco de unidad, democracia y autonomía.
El nuevo líder por último ofreció un trabajo serio y de representación para los trabajadores, al comentar que su único interés es que se respeten absolutamente sus derechos.
